La visibilidad en la carretera es uno de los elementos más importantes de la conducción.
¿Sabes que cuidados necesita un limpiaparabrisas o cuándo cambiarlos? Aquí te dejamos algunos consejos para ayudarte en este aspecto:
Sustituir los limpiaparabrisas por lo menos una vez al año.
Unas escobillas realizan más de 750.000 barridos del parabrisas en su vida útil, lo que supone limpiar la superficie de 80 campos de fútbol. Se recomienda sustituirlas una vez al año o cuando comienzan a aparecer franjas o superficies veladas en el campo de visión al accionarlos. Si hacen ruido en cada movimiento, hace mucho que tenían que haber sido cambiadas.
Limpiar las escobillas una vez al mes.
Para que las escobillas mantengan su eficacia durante el mayor tiempo posible, es aconsejable limpiarlas periódicamente con un detergente y esponja (al menos, una vez al mes), para eliminar cualquier adherencia que interfiera en el barrido.
Intenta que tu auto este bajo techo todo lo posible.
El desgaste de las escobillas procede, en primer lugar, de soportar las inclemencias climáticas: fluctuaciones de temperatura entre -10°C y 50°C, y exposición a la luz solar directa. Los autos que duermen en garaje conservan mejor sus escobillas que los que soportan el frío y la incidencia directa del sol. En segundo lugar, el desgaste se ocasiona por la propia fricción contra el cristal, que se acentúa con la suciedad e insectos.
No utilizar el limpiaparabrisas cuando el cristal este sucio.
No es recomendable accionar los limpiaparabrisas cuando el cristal esté sucio ya que daña la superficie de las escobillas.
Llena tu depósito del limpiaparabrisas con el producto adecuado
Utilizar un líquido limpiaparabrisas mejora la eficacia y duración de las escobillas.
Circula con seguridad durante las festividades y sigue estos consejos. Que un cristal sucio no te arruine las vacaciones.